La cena siempre lista a las seis.

Existe la falsa creencia de que la violencia de género solo se produce mediante agresiones físicas. Sin embargo, en nuestra sociedad hay otras formas de violencia que pasan desapercibidas.  

Si tu pareja te exige y te responsabiliza por las tareas del hogar, te supervisa constantemente para que estén “bien hechas”, te culpa por todo lo malo que pasa y se enoja si algo no sale bien, puedes estar ante una situación de violencia de género. La responsabilidad de las tareas del hogar y del cuidado de los hijos e hijas, de las personas adultas mayores, con discapacidad y otros familiares, debe llevarse en conjunto para que exista un mayor equilibrio e igualdad en la pareja.

Son formas de maltrato muy sutiles, difíciles de detectar para las víctimas e incomprensibles para las personas cercanas a ella, puesto que no se da ni un golpe y proviene en la gran mayoría de las veces de hombres cercanos, en quiénes se espera confiar.
Todas las personas tienen derecho a un hogar seguro y a vivir sin violencia.